Porr Marcela Pérez Silva

A Diana Ávila, con admiración y cariño

1.

Rompe el alba a los clarines de tu voz

Una mirada tuya basta para detener los vientos

En tus cabellos se enredan los sueños

de los hombres sencillos

y las mujeres completas

como tú:

mucha muchacha.

Hermana de la belleza

y la justicia

Señora de la noche

Luz del alma de la luna llena

Guerrera y madre

Partera

Diosa doncella armada de aljaba.

Eres, a la vez, el dardo

y la diana.

Dio en el blanco

quien te puso el nombre.

2.

Cómo seguir a tu lado

compañera

ahora que eres luz

flor de diente de león

pelusilla

desparramada al viento.

Pronto serás colibrí

picaflora viajera

qenqe de nuestra tierra

amada

abeja de aguijón y miel

bien repartidos.

Y yo veré pasar

tu cabellera

soñando los sueños

de muchachas nuevas

tu sonrisa victoriosa

en los puños alzados

de los que no se rinden.

El pan y la belleza repartidas

en los raudales de tu risa

de trompeta de cristal

madrugadora

entrañable

diana.