#ElPerúQueQueremos

DESDE BUENOS AIRES, UNA MIRADA CRITICA...

ARGENTINA. ÁNIMOS ALTERADOS

Publicado: 2015-11-25


Por CLAUDIA COUSO 

El día 23 de noviembre, horas después de que Mauricio Macri ganara la presidencia de la Nación, sorprendió una editorial del diario La Nación, el periódico que suele representar la mirada de los sectores socioeconómicos mejor posicionados de la sociedad argentina.

La editorial, intenta mostrar al proceso de justicia transicional en la Argentina como hechos de venganza de una izquierda que había logrado ascender al poder –según la mirada de este periódico- a través del kirchnerismo.

Hay alerta que deben ser activados a partir de esta editorial: ¿Qué efectos buscaba? ¿De quiénes? Obviamente no se trataba de un mero ensayo reflexivo, sino que buscó generar un efecto que no podía omitir la circunstancia de que se publicaba un día después de que el gobierno al que se acusaba de venganza era derrotado en las urnas, y la derecha triunfaba.

La buena noticia es el efecto que tuvo: un repudio general que incluyó a todos los sectores de la sociedad. Tanto fue el rechazo, que al día siguiente el mismo diario saca una nota en la que menciona las repercusiones negativas que tuvo dicha editorial.

No fue el único enojo que atraviesa el ánimo de los argentinos: están aquellos que votaron al kirchnerismo y están profundamente enojados con quienes no lo han hecho, y que han preferido un gobierno que califican como una vuelta a los noventa, donde en la Argentina gobernaba el neoliberalismo. Estos, que han decidido votar a Macri, también están en gran parte enojados, por la forma en que se sentían tratados por el gobierno, que ahora termina su mandato.

Paradójicamente, la editorial de La Nación nos trajo aire fresco: sabemos que las acusaciones de la militancia kirchnerista de que se trata de un pueblo sin memoria no es real, sino aceptaría lo que este medio de comunicación dijo. Parece que hay un límite, al menos eso parece, en materia de derechos humanos.

¿Entonces cómo podríamos caracterizar el pensamiento argentino promedio de hoy en día? Hasta hace poco tiempo los análisis que predominaban, trataban de explicar porque el argentino promedio era peronista: se apelaban a cuestiones culturales que hacían que la elección se inclinara siempre para ese sector. El significante vacío al cual se refería ErnestLaclau da cuenta de esto. Hoy todos los análisis tratan de explicar no como el 48,60% de los argentinos sigue votando la opción peronista, sino como el 51,40% restante se ha inclinado por la opción neoliberal.

Recientemente, en un análisis proveniente del mismo kirchnerismose decía que su espacio “te llevaba al paraíso a patadas en el culo”. Muchos ciudadanos están cansados de las formas y ni siquiera creen que ese paraíso tenga que ver con la Argentina. Otros, peronistas más convenidos, creen que su gobierno mejoró tanto las condiciones de sus ciudadanos, que estos se “aburguesaron” y terminaron votando a una oligarquía a la que admiran pero que los terminará devolviendo a la pobreza. Se trata de “desagradecidos” que “ya volverán” en algún momento.

Entre los que votaron a Macri seguramente estarán esos “desagradecidos” que consideraran que los derechos son adquiridos y no prebendas que se les debe a un gobierno, estarán también los que aspiran a un país gringo, también otros que en los últimos años no ven en el gobierno nuevos logros sino políticas erráticas y que no siempre benefician a los sectores medio o bajos, los que creen que el Estado no debe ayudar a los sectores que lo necesitan, otros que sienten que los modos autoritarios con los que a veces se maneja el gobierno no los representa, lo que creen que los planes sociales sirven para mantener vagos, los que creen que Mauricio Macri puede hacer un país mejor.

En cambio entre los que votaron a Scioli se encontraran los militantes con utopías, pero también aquellos otros (típica personalidad porteña) que creen que nadie hace las cosas mejores que ellos y desprecian a los que piensan distinto, los que agradecen esos derechos que han sabido conseguir (casamiento igualitario, régimen laboral para el personal doméstico, pensión para aquellos que no habían podido hacer sus aportes, madres de los sectores más empobrecidos que hoy tienen una asignación para sus hijos, abuelas que han recuperado a sus nietos desaparecidos), otros que son de familia peronista y que votan a cualquier opción que provenga de este espacio político, otros que no quieren que haya cambios, otros que pensaron que Scioli era la continuidad del “proyecto”, y otros a los que Scioli les gustaba porque “no era lo mismo que Cristina”.

Lo cierto es que los dos candidatos, el que gano y el que no, no demostraron nunca diferencias ideológicas sustanciales, quizás porque además evitaron definirse. La gente hizo lo que pudo con lo que había. La pregunta entonces es más compleja, no se trata de porque ganó Macri, sino la de entender el camino que nos llevó hasta acá.


Escrito por

nuestrabandera

Prensa nacional de izquierda


Publicado en

Nuestra Bandera

Prensa nacional de izquierda